Cómo regalar vino y quedar como un experto

Imaginate esto: entras a la tienda online de BONVIVIR con la misión de comprar un vino para regalar. Queres impresionar. Queres que, cuando la otra persona descorche la botella, piense: “¡Qué buen vino, se nota que sabe!”

Pero entonces te golpea la realidad: miles de etiquetas, nombres en francés o inglés, precios que van de lo razonable hasta no tanto. Intentas sentirte seguro, como un conocedor mientras revisas etiquetas sin entender nada.

Si esto ya te pasó, no desesperes. Elegir vino como regalo no tiene por qué ser complicado. Con algunos tips, podes asegurarte una elección correcta.

Aquí, los mejores consejos para regalar vino y quedar como un experto.

Pensar en la persona, no en el vino

El mayor error al regalar vino es elegir lo que tomarías en vez de lo que le gusta a la otra persona. Antes de comprar, primero investiga un poco los gustos de quien lo va a recibir: ¿Prefiere tinto, blanco o espumoso? ¿Le gustan los vinos intensos y con cuerpo o más ligeros y frescos? ¿Es alguien clásico o le gustan las cosas fuera de lo común? Si no tienes idea, juega seguro con vinos versátiles y amigables para todos: un Pinot Noir, un Rosé o un Chardonnay fresco. Son apuestas seguras que casi siempre funcionan.

No te obsesiones con el precio

“No sé nada de vino, así que mejor compro el más caro para no fallar”. Error. Más precio no siempre significa mejor experiencia. En el mundo del vino, existen joyas ocultas en los rangos más accesibles que pueden sorprender más que una botella muy cara de una bodega famosa. En este rango, podés encontrar excelentes vinos de pequeños productores o regiones emergentes. Si queres sonar experto, buscá en la tienda vinos naturales, biodinámicos o de producción limitada. Son la gran tendencia y siempre causan buena impresión.

El vino para cada ocasión

No es lo mismo regalar un vino para una cena elegante que para un picnic en la playa. Así que toma nota de estas reglas básicas a la hora de elegir: • Para cenas con amigos: Un tinto equilibrado como un Malbec o un Bonarda son una gran opción. También puede ser un espumoso, que combina con casi todo. • Para cumpleaños: Si la persona es fan del vino, busca una botella especial, como un vino de su año de nacimiento, una botella alegórica a su nombre o club de futbol favorito, o uno de edición limitada. • Para parejas o momentos románticos: Nada grita más "esto es especial" que un buen Champagne. ¡Punto! • Para alguien que apenas empieza a explorar el mundo del vino: Un Rosé o un Sauvignon Blanc fresco pueden ser la puerta de entrada perfecta.

La presentación importa (y mucho)

Una botella suelta puede parecer un regalo improvisado. Pero una botella bien presentada se convierte en un regalo memorable. • Acompáñala con una dedicatoria escrita a mano. Algo simple como: "Brinda por los buenos momentos y que vengan muchos más” puede hacer que el regalo se sienta más personal. • Agregá un accesorio útil, como un buen sacacorchos o un estuche elegante. • Si querés hacer algo realmente especial, podes buscar una botella en formato magnum (1.5L). Es imponente y siempre impresiona.

Si quieres sorprender, busca más allá del clásico Malbec

Si queres regalar un vino y al mismo tiempo sorprender con algo nuevo, probá con variedades menos conocidas como Syrah, Cabernet Franc, Albariño, Criollas, Semillón o, incluso, un vino dulce de cosecha tardía.

Ahora bien, más allá de la botella, regalar vino es regalar una historia, un momento especial. No se trata solo de la etiqueta o del precio, sino de lo que transmite.

Así que la próxima vez que te encuentres frente a un mar de botellas para elegir, recordá estos consejos y elegí con confianza. Porque cuando alguien abra tu regalo, no solo verá un vino. Verá un gesto pensado, con intención. Y eso vale más que cualquier etiqueta de lujo.