La vitivinicultura argentina cuenta con más de 400 años de historia y esto es atributo importantísimo para el sabor de nuestros vinos. Durante estos siglos, las regiones vitícolas se poblaron de figuras que ayudaron al desarrollo de la actividad y posicionaron al país entre los más importantes de la vitivinicultura mundial. Basta visitar las regiones vitícolas para descubrir viñedos centenarios, bodega con mucha tradición y el expertise de las nuevas generaciones que llevan en la sangre el conocimiento de sus antepasados. La Selección Insignia BONVIVIR de diciembre logra reunir tres vinos que honran estas tradiciones con fineza y sofisticación.
Benegas Single Vineyard Cabernet Franc – Cabernet Sauvignon “El pedregal” 2022 es uno de los vinos más preciados de Federico Benegas Lynch quien utiliza las uvas de su Finca Libertad, plantada hace más de un siglo por su abuelo. Este tinto de color rojo rubí con matices violáceos propone un perfil complejo con predominancia el Sauvignon que aporta elegancia con tonos de frutos rojos, casis y grafito con detalles de tabaco. El Franc suma frescura y matices herbales. En boca es armónico con buen cuerpo y textura aterciopelada. Los taninos, finos y jugosos, decretan un final largo y agradable. Tinto sobrio y equilibrado.
Otra joya de la vitivinicultura argentina es Nicola Catena Bonarda Parcela 2021, un tinto que Alejandro Vigil elabora a partir de una antigua finca que la familia Catena posee en El Mirador, zona Este de Mendoza. Fermentado con levaduras nativas y criado 18 meses en barricas de roble francés, resulta rojo violáceo, profundo y brillante, mientras que aromáticamente despliega tonos balsámicos con frutos rojos y negros maduros, confitura de casis y violetas. Hay especias, ahumados y hierbas. En boca es franco, repite la identidad de nariz con centro de paladar jugoso. Es denso y envolvente, con taninos redondos que imprimen un final aterciopelado y largo.
Finalmente, Rosell Boher Brut Nature Encarnación es un vino tributo elaborado por Nicolás Calderón con uvas de regiones frescas del Valle de Uco. En este caso el assamblage es 80% Chardonnay 20% Pinot Noir y tras una crianza de 24 meses sobre lías en pupitres, es amarillo brillante con burbujas finas y delicadas. En nariz desborda de complejidad con buen carácter champenoise que suma a los frutos blancos y cítricos maduros tonos especiados y de frutos secos. En boca es vibrante con buen cuerpo y tensión. Las burbujas son finas y realzan la frescura. El final es largo y muy elegante con regusto especiado. Espumoso super complejo.
POR MES
3 botellas
$116220