Las etiquetas de los vinos nos brindan mucha información, a veces tanta que nos perdemos. Pero hay términos que todos podemos comprender sin la necesidad de ser expertos. Por ejemplo, si dice Reserva sabemos que hubo contacto con el roble pero qué pasa cuando dice “Gran”….
Este término, muy utilizado en las bodegas más tradicionales de Europa, siempre tuvo una connotación positiva y nos indica que estamos ante una selección, como mínimo, especial. Mientras que en algunos países hay una legislación que establece al detalle el significado en Argentina no debe alcanzar con saber que es uno de los vinos exclusivos de la bodegas tal podremos comprobarlo con las dos etiquetas de la Selección Alta Gama de octubre, dos grandes vinos que bien sabemos son dos vinazos.
Por un lado, desde los viñedos de Agrelo (Luján de Cuyo), Lamadrid Gran Reserva Malbec 2016fue fermentado en huevos de concreto y luego criado por 18 meses en barricas de segundo uso y finalmente reposo durante dos años en botella. Así resulta de color rojo violáceo intenso con reflejo púrpura brillantes y aromáticamente es expresivo, profundo y sobrio con perfil de frutos rojos maduros, ciruelas, cerezas y arándanos, con tonos propios del paso por barrica como clavo, vainilla y cedro. En boca es amplio, carnoso con buena estructura y taninos firmes. Fluye jugoso e intenso con final largo.
En cuanto al Riglos Gran Cabernet Franc 2017de José Hernández Toso, se trata de un tinto de Tupungato, Valle de Uco, criado por 18 meses en barrica y fudres de roble francés, un proceso que le permite conservar un color rojo rubí brillante con tonos violáceos a pesar de los años mientras que en primera nariz se mantiene frutal, profundo con tonos de cerezas, casis y moras que se complementa con tonos especiados y herbales. La crianza suma dejos ahumados y de clavo de olor. borda el paladar con buen cuerpo y fluye envolvente, terso y sabroso. Taninos pulidos de textura firme que aseguran un final largo.
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