Contemporáneos y elegantes.

Es común que en el mundo del vino busquemos encasillar los estilos como una forma de guiar al paladar. Y siempre que lo hacemos utilizamos extremos, por ejemplo, están los intensos y los suaves, los frescos y los cálidos, y así vamos etiquetando. Una cuestión de algunos años atrás se dirimía entre los vinos clásicos, emparentados a las elaboraciones más tradicionales y los vinos modernos, donde la enología con buen uso del roble definía la potencia y así la modernidad.

Hoy las cosas cambiaron y esos dos estilos se fusionan en lo que se comienza a escuchar como vinos contemporáneos ya que a partir de técnicas tradicionales puestas en valor se realizan técnicas modernas para lograr vinos linkeados al origen, el sabor mas fiel y tradicional que todo vino debería ofrecer.

Para la selección Alta Gama de julio nos ocupamos de buscar dos vinos que de la mano de productores comprometidos con el terroir logran vinos de sabor actual y elegante.

Finca Flichman Expresiones De Tupungato 2021 es una creación de Rogelio Rabino que trae nuevamente al juego una vieja línea de Finca Flichman, bodega histórica de Maipú, Mendoza. Es un corte, Cabernet Sauvignon y Malbec, elaborado con uvas del Valle de Uco, que recibe 10 meses de crianza, 50% en tanque de hormigón de 500 litros y 50% en barricas francesa. Es un tinto rojo rubí profundo y brillante que aromáticamente propone una linda complejidad de frutos rojos y negros, especias y confituras con detalles ahumados del roble y trazos mentolados. Al paladar es de buen cuerpo, fluye tenso con taninos jugosos y se afirma frutal con elegancia y final fragante.

Por su parte, Finca La Escuela La Piedra 2020 de Mil Suelos, es un vino que nació moderno y se acomodó, en los últimos años, entre los de expresión tradicional para el Valle de Uco. Creado por Alejandro Sejanovich con uvas que nacen del sector más pedregosos de un viejo viñedo de Paraje Altamira. Es rojo rubí con matices violáceos y aromáticamente profundo con buen caudal frutal con ciruelas maduras, moras negras, arándanos frescos y cassis. También despliega tonos balsámicos, terrosos, de hierbas aromáticas integrados a los tonos del roble. Caudaloso con sabor frutal intenso y firme. Buen cuerpo en medio de boca, envolvente con textura aterciopelada. Taninos jugosos y amables que se aprecian en un final largo.